martes, septiembre 26, 2006

Media Maratón del Báltico - Tallinn (Estonia)

Pues sí. Los AEM también competimos a nivel internacional.

Fue el pasado domingo 24 de septiembre en Tallinn, la preciosa capital de Estonia, que cuenta con un centro histórico de corte medieval de una belleza imponente.

Era un fin de semana largo y partí, junto con once corredores más de Caixa Catalunya, camino del Báltico. A pesar de los rigores del tiempo por aquellas latitudes tan septentrionales, con abundantes lluvias y temperaturas medias de unos 10 ºC para estas fechas, la meteorología nos fue propicia y gozamos del sol y de unos confortables 20 ºC de promedio.

El asunto turístico y culinario lo resolvimos con suficiencia durante toda la jornada del sábado, así que, sin más dilación, pasaré a desvelar los entresijos de la carrera.

Nos levantamos a las 8:00 y desayunamos en el hotel. A las 9:30 salíamos camino del lugar de comienzo de la Maratón y Media Maratón del Báltico. No eran más de 10 minutos de autobús (2 paradas). El emplazamiento de la salida se encontraba en paralelo a un paseo junto al mar.

El pistoletazo se produciría a las 12:00, así que tuvimos tiempo de descansar contemplando las vistas del mar.

Las dos carreras, más otra de 10 km, comenzaban al unísono. Al mediodía nos poníamos en marcha. Como de costumbre, me ocupé una posición bastante retrasada, de modo que me tocaba ir haciendo eses, parando y arrancando. Por suerte, la calzada era bastante ancha en un inicio y en poco más de 1 km, pude comenzar a correr de verdad. En los primeros compases de la carrera me emparejé con un lituano que, por su forma de correr, me pareció bastante bueno. El ritmo me parecía exigente, teniendo en cuenta mi respeto a una distancia que hace más de un año que no corría, pero no tenía pruebas feacientes, pues no vi ningún punto kilométrico hasta el 5. Y efectivamente, íbamos rápido (19:31). Bien es cierto que se trataba de la parte más plana y fácil de la carrera. Me encontraba con fuerzas, pero me preocupaba el final. El compañero lituano siguió al mismo paso, pero yo no quise seguirlo (seguro que me hubiera reventado).

Seguí a mi paso. nadie me inquietaba por detrás. A los 2 de delante los tenía a unos 100 metros. Así fueron pasando los siguientes 5 kilómetros. Se sucedían los toboganes y los cruces por una carretera que no estaba cerrada al tráfico. A menudo se equivocaban los de delante y cruzaban de lado a lado de la carretera de forma innecesaria y yo, claro, hacía lo mismo, recorriendo metros de más.

Justo en el kilómetro 10 (40:09) fui alcanzado por la primera mujer de la maratón (a la postre la ganadora final). venía acompañada de un experto corredor, aunque no sé si iban juntos o era casuelidad, pues el estonio no lo entiendo. Pasaron muy fuerte y tuve que apretar durante un kilómetro para no perder su estela. Al final me hice a su ritmo y les ayudé con sucesivos relevos (ella siempre bien resguardada). El estonio me decía algo, creo que quería que trabajásemos juntos para cazar a dos corredores que teníamos por delante. Yo siempre le contestaba lo mismo: "difficult, difficult". Más adelante pasamos por un tramo demencial de piedra suelta (como si se tratase de la vía del tren) por una carretera en construcción. Por el tiempo invertido, debía medir más de 1 kilómetro. Allí perdimos algo de tiempo, pero lo que más temía era sufrir un esguince. la chica se quedó un poco atrás, y el estonio también (creo que se quedó a esperarla).

Se sucedían los kilómetros por caminos que bordeaban frondosas arboledas y bonitas casas situadas en zonas residenciales. El perfil era muy quebrado, con continuos toboganes. Nos reagrupamos de nuevo. A partir del kilómetro 15, tuvimos que afrontar una subida continua de unos 3 kilómetros. La hicimos los tres juntos. En el 18, el terreno se hizo más propicio, en ligera bajada, solamente interrumpida por algún repecho de poca importancia.

En los 2 últimos kilómetros me quedé sólo con la chica y la ayudé un poco llevándola a ritmo (tampoco hubiera ido mucho más lejos si hubiera apretado). Los últimos 600 metros transcurrían por un velódromo de ciclismo. Al final, 1h 27' 18" (puesto 25), que no está mal para mi condición actual y los rigores de la carrera.

En todo memento gocé de buenas sensaciones y de fuerza en las piernas. No pasé ningún apuro, hecho que fortalice mi moral de cara a sucesivas carreras.

Los compañeros (9 en la media y 3 en maratón) lo hicieron muy bien. Todos terminaron sin contratiempos y uno de ellos ocupó la tercera posición en la categoría de más de 50 años, con una marca de 1h 36'

Por la tarde más turismo y divertimento, y el lunes, volvimos a casa.

Más información en: http://www.marathon.ee/index_eng.php

Santos Sanz

1 comentario:

Anónimo dijo...

Se rumorea que seguiras corriendo con los de la Caixa Catalunya, claro con estos viajes........