Me toca hablar de mi experiencia en la Marató de Barcelona 2013. Tras más de tres meses de buenos entrenos, un buen test de 30km, llegaba a la semana de antes con bastante optimismo y ganas de aproximarme a las 3h45m.
Pero Murphy siempre está al acecho y esta vez se convirtió en gripe para mi hija de casi tres años, Laia. Como mi mujer tampoco estaba muy fina y además la niña, con ese sexto sentido que tienen los niños para "fastidiar" a los padres, pedía que me fuera a dormir yo con ella, pues me tocó pasar gran parte de las noches de la última semana durmiendo al lado de mi hija y despertándome cada hora o dos horas. Además me pegó el resfriado, así que estuve a base de frenadoles hasta el jueves (y moqueando los 42,195km de la maratón, que vergüenza me daba pensar que podía darle a alguien).
Con ese panorama me presenté optimista el domingo, esperando al menos bajar de 3h54m y hacer mejor marca. Llegué justo a la salida (pensaba que era a las 8:45) y no pude coincidir con el resto de comeKMs, lo cul me hubiera venido muy bien. Tomé la salida con calma, sabiendo que hasta el km 10 no debía tirar mucho. Me sentía bien de sensaciones y de piernas, y la única pega es que notaba la camiseta muy fría y pesada cuando me echaba agua con la esponja (error quizás?). Además los geles tampoco me acabana de sentir bien. Llegué a la media maratón con el mismo tiempo que el año pasado, y bastante cómodo. Pero fue a partir del km 22-24 cuando de repente sentí que algo no iba bien en mis piernas: las rodillas me dolían mucho, y el estómago lo notaba pesdo (quizás me pasé bebiendo agua). Llegado al 25 vi que iba a sufrir y no iba a hacer MMP, así que empecé a plantearme la retirada. La Diagonal se me hizo infinita y, además, vivo en el Barri de Poblenou, así que pensé en abandonar, ducharme e ir a por la bolsa. Llegando al km 30 me paré (se ve en el vídeo :-) . Las rodillas dolían mucho (la edad + el frío y humedad quizás). Entonces pensé en mi hermano esperando en el km37, las horas de entreno y lo mal que me iba a sentir subiendo desde el metro a la Fira para coger la bolsa, viendo a todo el mundo llegar. Empecé a tirar, me uní a las liebres de las 4h durante unos kms, hasta que las dejé ir y me dediqué a disfrutar de la carrera, del público y de los corredores, permitiéndome alguna broma. Pude ver a mi hermano, lo cual me produjo subidón y encaré la subida al Paral·lel contento porque había superado otra maratón.
Y la verdad es que estoy contento a pesar de la marca, 4h8m. Las agujetas me han durado 1 semana, lo cual indica que lo di todo. En Berlín, si recordáis el post, hice mal tiempo y el martes siguiente ya no me dolía nada. Esta vez creo que simplemente mi cuerpo no estaba fino y mi cabeza no está preparada para tirar del cuerpo. Ése es mi handicap, mi coco que enseguida empieza a centrifugar en negativo. Quizás para la próxima maratón me ponga música... Sé que no es muy ortodoxo pero me dio resultados en la Maratest, quizás con una distracción musical aleje los dolores de la cabeza.
Nada más acabar llamé al coche de los comeKms que estaban exultantes por sus maratones, lo cual me alegró mucho y me dio pena no haber podido coincidir. La buena noticia es que a pesar de mis 40 tacos subí dos posiciones en la categoría m65 de la Lliga Championchip (estamos preparando la caracterización para la entrega de premios al final de temporada).
Ahora a pensar nuevos retos y a ver si puedo sacar tiempo para coincidir con los comeKMs en carreras o rodajes.
(1cualquiera = Pepe González)
Edito: añado dos fotos :-)
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