Hola a todos,
esta carrera es una de las que he repetido todas las veces que se ha celebrado desde que empecé a correr, porque me gusta como está organizada. A principios de año y después de la resaca de las fiestas navideñas, en Barcelona se celebra uno de los mejores "diezmiles" de la zona. Se trata de una carrera formada por dos vueltas a un circuito que tiene como partes fundamentales la Gran Via, el Paralelo y la parte del eixample del barrio de Sant Antoni (de ahí el nombre de la misma).
Oficialmente esta carrera pasará a la historia por ser la primera en la que todos los que nos hemos decantado por hacer el cambio de chip corriamos bajo el mismo nombre. Allí estábamos una pequeña representación: José María, Joan, Santos, Helena, Antonio y yo. Después se nos unieron gente de la Caixa, Albert y Jordi.
A simple vista había bastantes objetivos a atacar. Joan se reencontraba con el asfalto después de muchos meses. José María quería mejorar su magnífica marca de la Jean Bouin (47'). Santos, Albert y yo intentaríamos darlo todo para conseguir un crono lo más bajo posible y Jordi, según palabras suyas, intentaría simplemente acabar porque no había podido descansar demasiado (es lo que tiene transnochar ;)).
La Jean Bouin es una carrera muy rápida, por lo tanto es muy buena para lograr marcas personales. En mi caso, siempre hago un tiempo muy próximo al de la Jean Bouin (recordar que ésta parece tener un pequeño error de medición). Mi objetivo, más allá de conseguir marca, era conseguir quedarme lo más cerca posible de los 36'13'' que hice en la Jean Bouin.
Después de calentar nos dirigimos a hacer cola, como siempre, para salir lo mejor posible. Esta vez el tiro de salida fue un verdadero trallazo. A más de uno le pegó un buen susto y más teniendo en cuenta lo cercano que quedaba el atentado de Barajas. Después del estruendoso petardazo, unas filas de fuegos de artifico nos acompañaba en el paso por la salida, parecíamos los galácticos en el día de la presentaión del equipo. Desde aquí como siempre, hacia delante y a sufrir. Poco nos pudimos decir José María, Santos y yo en ese momento. Los tres que estabamos juntos en la salida nos lanzamos con todas las ganas del mundo. En seguida José María se quedó detrás. Santos y yo intentábamos ayudarnos para lidiar de la mejor manera posible con los contratiempos de una salida demasiado poblada, y es que cada vez somos más los que nos apuntamos a estos eventos.
Al bajar hacia la ronda San Antonio me pareció ver a Albert que nos sacaba un poco de ventaja. No fue hasta el paralelo donde pude darle caza. En ese momento Santos perdió un poco de fuelle y se quedó algo más rezagado, aunque no demasiado. Albert y yo nos enzarzamos en una batalla (amistosa) con el único fin de hacerlo lo mejor posible. A partir de este punto fue constante el avanzarnos el uno al otro y el acompañarnos en algunos puntos.
En la mitad de la carrera, es decir, al final de la primera vuelta, Albert iba en cabeza. Pasó con un tiempo de 18'14''. Yo pasé unos dos segundos después y Santos unos 15 segundos más atrás. En este punto José María marcó un crono espectacular de 22'03'', lo que anunciaba que podría establecer una nueva marca personal. La noticia triste de la jornada fue que en este punto Joan tuvo que abandonar. Sintió molestias en un gemelo y prefirió pararse muy a su pesar. Una pena porque lleva mucho tiempo sin poder disfrutar de las carreras. ¡Ánimos y espero poder verte pronto con nosotros!
Aproveché para hidratarme en el habituallamiento de mitad de carrera y me lancé a por Albert. En el paralelo le di caza y al llegar a la Gran Via comencé a distanciarme. Me sentía muy bien y quería tirar con fuerzas. Poco a poco me fui alejando y aunque Albert parecía pasar por un mal momento yo tampoco tenía tantas fuerzas como me habría gustado. Esta segunda parte de la carrera la hice más solo. Pero en el kilómetro 8 Albert me sorprendió llegando de nuevo a mi altura, la verdad es que ya no esperaba verle. El ritmo que llevábamos era bueno, pero no lo suficiente como para bajar de 36', nos quedaríamos cerca pero había que tirar fuerte. Albert lo sabía y decidió atacarme desde lejos a falta de kilómetro y medio. A mí me costaba seguirle y en poco tiempo me sacó unos casi insalvables 10 segundos. Pero en la recta del final me crecí y lancé un fuerte sprint, sabiendo que no le daría caza, pero por lo menos recorté la distancia respecto a él a sólo 2 segundos.
Me encantó compartir esta carrera con Albert. La verdad es que es muy divertido poder "luchar" en una carrera con alguien. Esto hizo que nos ayudáramos mutuamente y que disfrutáramos más de la carrera.
Por otro lado Santos no pudo hacer una segunda vuelta tan buena y perdió algo más de tiempo. Parece ser que no se encontraba muy bien y sufrió más de lo que le habría gustado. Aunque viendo el tiempo que hizo habrá que temerle para cuando se encuentre bien.
Jordi no sólo acabó la carrera sino que también consiguió hacer un tiempo muy bueno y mención especial para José María que logro su ansiada marca personal. La verdad es que es muy difícil superarse y él lo ha conseguido en sus dos últimas carreras. Me siento muy orgulloso de él, más que por el tiempo conseguido, por el esfuerzo y la dedicación que ha puesto en sus entrenos. Yo no tenía ninguna duda de que podía hacer ese tiempo, de hecho, creo que puede hacer mucho menos, pero como siempre digo: tiempo al tiempo. Ah! y cuidado Parrilla porque José María ya está ahí!!!! jejejeje. (Deléitanos con algún comentario de tus sensaciones Jose).
Con todo esto los tiempo oficiales de la carrera quedaron como siguen:
José María: 44'42''
Jordi: 43'36''
Santos: 37'42''
Albert: 36'27''
Pedro: 36'24''
Para acabar, decir que se echó en falta lo de todas estas últimas carreras: la gente que no vino y a los que vinieron y no pudieron competir (estoy deseando que te recuperes Antonio!!!... aunque sé que dirás que tú más!)
Un abrazo a todos,
Pedro López Muñoz
3 comentarios:
Pido disculpas por haber subido esta crónica tan tarde, la tenía escrita desde hace muchos días.
No quería tapar otras noticias que eran importantes... ahora parece que ya no lo son tanto.
Un abrazo,
Pedri, muchas gracias por hacerme recordar ese gran momento, la verdad es que disfrute mucho en esta cursa, y fue como un alivio personal, todos, Santos, Pedri, Antonio, todos me pedíais que estuviera por debajo de 45 y al final lo conseguí, es como decir, ya he conseguido lo que pretendía, a partir de ahora a lo que venga.
Antes oía hablar de la Siberia, y me imaginaba a la gente con los pingüinos y lo veía súper complicado, ahora hago la Siberia con una facilidad, y aún me quedan fuerzas para afrontar algunos Sprints y subir el Once de Septiembre. Por cierto Pedri, no parece que tenga agujetas.
Estoy genial, muchas gracias entrenador, todo esto es gracias a ti.
Valla carrerón Pedro me has hecho disfrutar mucho, y eso que sabía el final. Tengo que decir que yo también gocé mucho de la carrera desde la acera de enfrente. Fijándome como un búho buscando su presa, algo así como buscar a wally pero en movimiento y sin camisetas a rallas, pero… esos andares… son inconfundibles .Quien no reconoce a Joan de lejos acostumbrados a buscarlo en la lejanía de la pista en san feliu. Y eso se podría aplicar a cada uno de nosotros, corremos de una manera particular, como nuestras huellas digitales, nuestros andares son únicos e irrepetibles, junto con otros defectillos es lo que nos hace especiales.
En el paso por el cinco mil os fui buscando uno a uno y animando como un poseso, claro, yo estaba entero y me sobraba adrenalina.
Pero en vuestras llegadas a meta se me quedo una cara, primero de alegría al ver que Pedro igualaba su estado de Jean Bouin y luego de “besugo” cuando buscaba, desde el minuto 45, a mi hermano y no lo veía llegue a pensar que se había roto, como joanet, o desfondado. Mi cara era un poema ya pasado el minuto 50 lo vi por fuera en la acera enterísimo, no le había pasado nada sólo que : veo menos que “pepe leche” y se me coló entre el mogollón de peña.
Pues que sepáis que se sufre corriendo y también se sufre esperando, si no que le pregunten a Elena (aunque esta vez se escaqueo de la meta merecidamente pues es nuestra fan numero uno), o a mi familia esperándome en la maratón desde las 3 horas y llegue 16 minutos después, perdonar por la espera y por el pronóstico fallido pero yo quería hacer 3 horas.
Una cosa es lo que se quiere hacer y otra muy diferente la que acaba sucediendo, pero mientras dura esa ilusión somos felices y eso vale un imperio.
Adelante a todos con vuestros proyectos y si alguna vez perdéis fuerza, tranquilos, como dice mi suegro “ya llegará el verano”, a veces hay que tocar fondo para poder impulsarse con mas fuerza. No hice tres horas pero hice todo un pedazo de maratón, di lo que había en aquel momento, y luche con ilusión por mi proyecto.
Ahora estoy luchando por salir de mi lesión lo mejor posible y quien sabe si afrontaré otra maratón. No será por falta de ganas. Pero la vida en si no deja de ser una carrera de ultrafondo.
Bueno Pedro gracias por tu crónica que me ha echo recordar viejos tiempos y sentirme orgulloso de mi familia y amigos. FORÇA……………
Antonio Moreno Muñoz
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