miércoles, septiembre 25, 2013

CRONICA ULTRA CAVALLS DEL VENT 2013

Buenas! Por fin después de tantos meses sin crónicas ni competiciones ahí va mi último reto! Ultra Cavalls del Vent 2013!

Sabado 21 de septiembre de 2013

Eran sobre las 3 de la mañana y tenía los ojos como platos. Imposible dormir, descansar, imposible pensar en algún recuerdo bonito o algo para intentar evitar los nervios que llevaba ya arrastrando desde hacía varios días.
En fin, pasan los minutos y suena el despertador a las 5 de la mañana. Me levanto, desayuno y empiezo a elegir la ropa que finalmente llevaré en el primer tramo de la cursa. Una vez llegamos a Bagá sobre las 6h, nos dirigimos a la plaza central dónde se daría en una hora la mítica salida de la cavalls del vent con su música de “gladiador”.

Empieza la cursa!
El primer tramo de cursa tuvimos que ser muy conservadores; nos esperaba un tramo de subida sin parar de 14 km con un desnivel positivo inicial de mas de 1500m hasta el segundo avituallamiento “el niu de l’àliga”.
Una vez arriba en el refugio, paramos 5 minutos a abrigarnos y comer algo rápido para poder hacer una bajada a buen ritmo, pero imposible. En el relieve era imperceptible ya que nos encontramos con bajadas de mas de 45º y muy técnicas, donde la exigencia articular y física no te permitía prácticamente ni descansar de la subida. Realmente esto fue un golpe duro psicológicamente ya que veíamos que el tiempo total de la cursa se nos alargaría mas de lo pactado previamente.
 Aún así, llegamos a Bellver de la Cerdanya km (mítico pueblo del Francesc) km40 en menos de 6h 30min, que era mas o menos el tiempo esperado, pero con muy malas sensaciones. Muchísimo calor y muy tocados moralmente, cosa que generó unas malas sensaciones brutales de cara la segunda subida hacia Prats d’aguiló. Pero bueno, nos lo tomamos con mucha calma; comimos, nos cambiamos de ropa i llenamos la mochila hasta los topes con el material mínimo obligatorio: manta térmica, camiseta térmica, paravent impermeable, gorro y guantes…). En fin la mochila pesaba como un muerto!
El primer tramo de subida fue clave. Entre el rato de recuperación de Bellver y el ibuprofeno cogimos buenas sensaciones de nuevo. El primer tramo de subida era poco exigente y andamos un buen rato para reponer fuerzas, pero una vez llegados a cortals, nos quedaba uno de los tramos mas duros hacia Prats d’aguiló.
Una vez allí, empezó el frío y las dudas; El Sabih hacia mala cara: pálido y con los ojos super rojos. La verdad es que allí fue el momento donde mas dudas tenía. Si el pinchaba, no sabía hasta que punto podría yo continuar, pero bueno nos pusimos ropa térmica e impermeable y a hacer la ultima cima hacia Estasen.
Una vez arriba, ví uno de los atardeceres mas bonitos de mi vida. Un paisaje insólito donde me veía inmerso por completo, en resumen, precioso!
La siguiente bajada hasta estasen fue muy bien! Una bajada de unos 10 km con algún tramo de pista y campo a través nos permitió coger un buen ritmo y adelantar a bastante gente hasta llegar al avituallamiento clave.
En estasen por sorpresa nos esperaban amigos, novias y familiares, a parte de un sinfín de gente animando y dando un soporte que en ese punto de la cursa era crucial, el km 70.
Aquí mas de lo mismo, comimos pasta, pastillas de sal, segundo ibuprofeno y sopa calentita para no enfriar el cuerpo.
Llegados a este punto supe que la acabaríamos porque Xavi supo reponerse y, dentro de lo que cabe ya hacía mejor cara.

Finalmente los últimos 30 km también fueron algo caóticos; Insisto! Viendo el dibujito del grafico del desnivel acumulado no se puede apreciar nada… Lo digo porque después de Estasen parecía “casi” todo bajada pero no….Nos esperaba una señora subida llamada “els empedrats”, desde el avituallamiento de snt. Marti hasta sant jordi de mas de 600m de desnivel positivo, con tramos muy técnicos y humedos cruzando rieras constantemente, pero pudimos con ella.
Y nada, una vez arriba ya empezamos a descender por una pista super incomoda y llegando finalmente a bagá a las 5:00h de la mañana del día siguiente, es decir, después de 22h y 10 minutos de trote por el Cadí.


En resumen, una experiencia inolvidable!

Marc Mitjans.

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